En A Píntega Marela, hoy queremos hablaros un poco sobre el piano, un instrumento capaz de tocarnos el alma y relajarla, con tan solo unas notas. Para que al tocarlo lo que se genere sea música, resulta esencial conocer cuáles son las partes del piano moderno.
Por ello, al igual que hicimos en 2018 con la gaita, a continuación, pasamos a enumerar todas y cada una de las partes del piano moderno, que, en general, conserva las mismas características desde finales del siglo XIX.
¿Qué es qué en las diferentes partes del piano moderno?
Apagadores
Tal y como puede deducirse por su nombre, los apagadores silencian los sonidos que generan las cuerdas.
Para que esto suceda, el pianista tiene que accionar el pedal derecho (así apagan el sonido de todas las cuerdas) o el central (sostenuto), que afecta solo a aquellos apagadores que estén alzados en ese instante.
Bastidor
Es la columna vertebral de las partes del piano moderno, dado que aguanta la tensión de todas las cuerdas, que puede alcanzar ¡las 20 toneladas!
Su construcción original se hacía en madera, pero debido a la necesidad de incorporar refuerzos de metal de forma sucesiva, Steinway innovó su estructura en 1856, al construirlo fundido en una sola pieza metálica. Esto le dio al bastidor una mejor sonoridad y una afinación más duradera.
Ahora, eso sí, es de hierro que, además, se recubre con una capa de bronce y varias de laca.
Caja (y su amiga la tapa)
La caja es lo que más vemos, es decir, el mueble, cuya función es prolongar la función de la tabla armónica. Bajo ella se sitúa la lira de los pedales y la refuerza el barrado, una sección hecha con grandes barras de madera que sostienen el bastidor.
Sobre la caja, se encuentra una de las partes del piano moderno más llamativas, la tapa, que es lo que “la capa al caballero”. Dicho de otra manera, tiene la función de cerrar el mueble y completar el conjunto, pero también sirve para dirigir el sonido hacia el público en las salas de conciertos.
Clavijero
Se trata de la base de madera, el lugar donde se insertan las clavijas de afinación. En general, se construye con láminas de madera maciza de haya, distribuidas una encima de otra.
La función del clavijero es asegurar la estabilidad de la afinación e impedir cualquier variación en la posición de las clavijas.
Por su parte, las clavijas son pequeños cilindros metálicos donde se aseguran las cuerdas, que se manipulan y afinan desde la parte superior, gracias a llaves especiales.
Un consejo: si estás pensando en comprar un piano, ya sabes que una de las evaluaciones más importantes que debe hacerse es oír si está en tono. Si la desafinación es muy patente y el piano suena rematadamente mal, puede ser que, además de estar desafinado, tenga dañado el clavijero.
Cuerdas
Sin duda, son las más numerosas de todas las partes del piano moderno: 224. Lo creas o no, se fabrican con acero duro al carbono y lo que es aún más llamativo, se colocan de tal forma que parecen simular un abanico, de modo que se abren desde el clavijero hasta el puente.
Esta disposición tiene un sentido que va mucho más allá de la estética y busca amplificar la sonoridad del piano.
Dentro de las cuerdas, encontramos los bordones, que son las de mayor longitud y que, por consiguiente, pertenecen al registro grave extremo del instrumento. Además, en cada tecla hay una única cuerda, entorchada con hilos de cobre.
Eso sí, en el registro grave se colocan 2 cuerdas por tecla, afinadas al unísono y, en el registro agudo, 3.
Macillo
Se trata de un elemento, controlado por una estructura de palancas, que golpea cada cuerda.
Controlado por el pianista (a través de las teclas), le permite modular el sonido que produce el piano. En concreto, el timbre y la intensidad de la cuerda en cuestión, que percute.
Mecanismo de percusión
Está compuesto por un grupo de piezas y palancas, cuyo cometido es llevar el macillo a las teclas, creando así la vibración y el sonido clásico del piano.
Pedales
Sin duda, conforman una de las partes del piano moderno más singulares. Situados a los pies del instrumento, en la mayoría de los casos, suelen ser 3:
- Forte o de resonancia (derecho). Como decíamos al principio, levanta, en una única y misma vez, todos los apagadores.
- Celeste (izquierdo). De forma lateral, desplaza los martillos. Gracias a ello, las cuerdas simples percuten más suavemente. Por su parte, las cuerdas dobles y las triples percuten como simples y como dobles, respectivamente. Como consecuencia este pedal consigue que se produzcan sonidos más débiles y diferente timbre, al resonar la cuerda no percutida por simpatía.
- Tonal (central). Solo es una de las partes del piano moderno en aquellos que son de cola. Su función es la misma que la del pedal forte, con la diferencia de que solo controla las que están bajadas, cuando el pianista lo pisa.
Puente
Es el lugar sobre el que se tensan las cuerdas, pero su importancia no se queda ahí, dado que el puente transmite la energía vibratoria de estas a la tapa armónica.
Está dividido en dos secciones, una para la región grave y otra para el resto.
Tabla armónica
Gran elemento de resonancia del piano, su función es amplificar la onda sonora producida por la vibración de las cuerdas. Se sitúa debajo de las cuerdas y en paralelo a las mismas.
Generalmente, la tabla armónica se compone de láminas de madera de 8 mm de grosor y en torno a 10 cm de ancho.
Teclado
La última de las partes del piano moderno es otra de las más conocidas, tanto por amantes del instrumento como por cualquier otra persona.
Cuenta con 88 teclas de madera de tilo, haya o abeto. Las que son graves tienen unos cilindros de plomo, que equilibran el peso de los macillos de la región grave y que, además, sirven para igualar el peso de todo el teclado.
Como has visto, el piano moderno es un instrumento que esconde una maquinaria apasionante. Si quieres aprender a valerte de ella y tocar cientos de piezas musicales, ¡apúntate a las clases de piano de A Píntega Marela!